Pregunta
Me han hecho una hernioplastia con malla, de una hernia inguinal izquierda directa, hace seis semanas.
Desde los primeros días después de la intervención, el testículo izquierdo no tiene el movimiento normal de subida y bajada dentro del escroto. Está permanentemente 'caído' aunque no presenta hinchazón, ni irritación, ni dolor, simplemente no responde a la contracción de los músculos hacia arriba.
Además de esto, noto lo que yo pienso que son dos nervios o dos tendones (como dos hilos), que vienen de la zona intervenida y penetran en el pene por la parte de arriba.
Están como a flor de piel y nada más rozarlos en la base del pene con un dedo o a la menor presión me producen dolor.
En mi desconocimiento del tema pienso que es como si estuviesen excesivamente tensionados, como si algo estuviese tirando de ellos desde la zona intervenida. Cuando tengo una erección cualquier movimiento en contra de ellos me produce dolor.
La primera revisión después de la operación no me la hacen hasta dentro de tres semanas.
Estoy angustiado y no sé si todo esto irá mejorando y las molestias desapareciendo con el tiempo, o si por el contrario, debo irme haciendo a la idea de que me han hecho una chapuza. Agradecería su opinión y consejo.
Respuesta
Para intentar calmar sus "inquietudes" la hernioplastia es hoy en día el método más seguro para la reparación de un defecto de la pared abdominal como la hernia que Ud. padecía.
Consiste en la aplicación de un material plástico, normalmente polipropileno, que se encuentra enlazado formando una especie de malla.
Este material plástico se utiliza para reforzar la zona inguinal que se encontraba debilitada y con el tiempo, dicho material tiene la propiedad de generar un tejido fibroso que hace muy difícil que la hernia se reproduzca.
Existen diversos modelos de dichas "mallas": unas tienen forma de cono y se introducirían por el orificio inguinal, otras reforzarían estructuras débiles en el conducto inguinal, pero en definitiva están diseñadas para realizar la reparación herniaria sin tensión, y que generen dicho tejido fibroso que refuerza la pared abdominal y disminuye la tasa de recidiva o de que se reproduzca la hernia.
Hay que entender que dicha malla, al ser una sustancia extraña al organismo, va a necesitar de un periodo de adaptación, por ello es normal que durante una temporada que puede oscilar entre 4 y 6 semanas, exista una pequeño edema o hinchazón en la región intervenida que va a ir mejorando durante el periodo postquirúrgico.
Por otro lado, en la disección anatómica de la hernia, el músculo cremáster, el que rodea al cordón que baja al testículo, hay que abrirlo y en ocasiones existe una alteración como la que Ud. describe, al igual que sensaciones de anestesia o disestesia (hormigueos, etc.). Todo ello es normal.
He de informarle que en los 6 meses que acontecen a la intervención todos estos procesos se van normalizando, porque existen puntos de sutura internos y adherencias que se van a ir remodelando durante este periodo.
De cualquier forma, aunque la visita sea un poco tardía, durante la consulta su
Cirujano cuando le revise la cicatriz y le explore, le resolverá todas sus dudas, que de forma resumida y para acabar de tranquilizarle, suelen ser bastante comunes.
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