¿Qué es la púrpura trombocitopénica?
Es una enfermedad que cursa por una falta de plaquetas y por ello, con hemorragias en piel y otros órganos. Esta causada porque los órganos inmunitarios producen anticuerpos contra las plaquetas, sobre todo en el bazo.
En los niños aparece tras una infección por virus. La púrpura trombocitopénica idiopática (PTI) se debe a interacción de la inmunoglobulina G (IgG) y otros anticuerpos con las plaquetas, lo que aumenta la destrucción plaquetaria. Los pacientes con PTI pueden permanecer asintomáticos o presentar hemorragia cutánea persistente (sobre todo en áreas expuestas a los traumatismos) o hemorragias por las mucosa (epistaxis, menorragia, equimosis). Las hemorragias internas y las hemartrosis son raras.
El diagnóstico se establece a través de la historia clínica, la exploración física y el recuento de plaquetas.
La hemorragia no relacionada con traumatismo no suele plantear problemas mientras el recuento de plaquetas se mantiene por encima de 20000/mm3. La hemorragia traumática puede aparecer con cifras de plaquetas entre 40000 y 60000/mm3. Los demás estudios de coagulación habituales suelen ser normales, excepto la prolongación del tiempo de hemorragia.
El tratamiento es innecesario en los pacientes con trombocitopenia leve y se reserva para los casos con hemorragia debida a trombocitopenia o los pacientes con cifras de plaquetas por debajo de 20000/mm3. El objetivo de la terapia consiste en detener las hemorragias y elevar la cifra de plaquetas por encima de 20000/mm3.
- Corticoides. La Prednisona se puede emplear durante 6 semanas y proporciona un porcentaje de éxito de hasta el 80%. Aunque los corticoides a largo plazo pudieran producir problemas por sus efectos secundarios, rara vez son necesarios los tratamientos prolongados y hoy en día se controla estrechamente su dosis, duración y prevención de efectos secundarios.
- Esplenectomía. La esplenectomía se reserva para los casos resistentes a la terapia con corticoides o con hiperesplenismo, es raro en la infancia. Proporciona un porcentaje de éxitos del 60% al 80%. No produce mayor problema posterior que la prevención de infecciones por gérmenes encapsulados tipo neumococo, que se hace mediante la administración de vacuna antineumocócica cada 5 años y el tratamiento precoz con Penicilina a la menor sospecha de infección.
- Fármacos inmunosupresores. Estos fármacos se emplean si la trombocitopenia persiste a pesar del tratamiento con esteroides, Danazol o esplenectomía. La Vincristina y la Vinblastina son los agentes de este tipo empleados con mayor frecuencia.
- Gammaglobulina. La gammaglobulina intravenosa a dosis de 400 a 1000 mg/kg/día se ha empleado con éxito en casos de PTI refractaria. Hoy en día, cualquier hospital con servicio de hematología puede abordar el control y tratamiento de esta enfermedad.