El principal síntoma es dolor e inflamación en la muñeca, concretamente en el hueso semilunar, que aparece de forma repentina. No es debida a golpes o traumatismos.
Si la enfermedad progresa el hueso semilunar puede fragmentarse y acaba por afectar a toda la movilidad de la muñeca.
Normalmente suele aparecer solamente en una mano y es más común en trabajadores con tareas manuales pesadas. Solo en el 10% de los casos la enfermedad es bilateral.