La uña encarnada se produce cuando el borde de la uña (generalmente de los dedos de los pies) se introduce dentro de la piel del dedo.
Es una situación muy frecuente y en algunas ocasiones viene acompañada de una infección bacteriana por estafilococos que puede agravar la situación.
La uña encarnada puede producirse por:
Si existe una inflamación y no se puede resolver al cortar la uña apropiadamente se debe de consultar a un podólogo o a un dermatólogo.
Dependiendo de la gravedad el especialista puede optar por:
Se realiza una extracción de la uña y de la piel sobrante y posteriormente se sigue un tratamiento con antibióticos (cefalexina) para evitar o tratar la infección bacteriana. Los baños con agua tibia pueden ayudar.
Tratamiento quirúrgicoSi no se aprecia mejoría con los tratamientos conservadores un especialista en el pie puede realizar una pequeña cirugía.
Consiste en realizar una resección parcial de la uña junto con la matriz para que no crezca en este lado. La técnica más utilizada se denominada Winograd. Para realizar la operación únicamente es necesario anestesia local.
La matriz es la base de la uña y su resección es importante para evitar recaídas y que la uña se encarne nuevamente.
La recuperación es bastante rápida. Se recomienda tomar antibióticos (cefalexina) durante 4 días para evitar las infecciones bacterianas y Diclofenaco para el dolor y la inflamación. Los puntos se retiran al de dos semanas.
Al introducirse la uña en la piel se produce:
Las principales medidas de prevención para evitar la aparición de la uña encarnada son: