El programa de entrenamiento del niño/adulto con asma bronquial debe incluir las mismas fases que otras pautas de entrenamiento:
El tipo de ejercicio, intensidad de realización, duración y frecuencia vienen determinados por el nivel aeróbico del niño. Éste se evalúa valorando la frecuencia cardíaca máxima que es capaz de tolerar sin que se desencadenen síntomas de disnea y ansiedad. Los pacientes con una limitación funcional conocida no deben superar un incremento del 30 % sobre la frecuencia cardíaca de reposo en el ejercicio mantenido.