En la alergia a frutas puede haber dos cuadros en general:
Se deben evitar en la dieta las frutas pomáceas (melocotón, albaricoque y derivados, manzana, pera), ciruelas, higos, cerezas, fresas, melón, kiwi, papaya, aguacate, moras, etc.
Siempre y cuando se tengan síntomas con cada una de ellas, no se suspenden todas, sólo las implicadas en síntomas actuales.
Tan solo podrá tolerar, seguro, cítricos (naranja, mandarina, pomelo).
En ocasiones hay una alergia cruzada por la presencia de pan-alérgenos en otras verduras y se suele considerar la exclusión de: Verduras crudas, guisantes, lechuga, escarola, lombarda, cebolla, ajo, etc.
En todo caso, y en función de su grado de tolerancia, puede ser conveniente que un niño alérgico a melocotón compruebe la tolerancia a otras frutas de la familia de las rosáceas:
Además, en algunos casos se asocia a alergia a frutos secos y especias: mostaza, avellana, castaña, albahaca, tomillo, orégano, cacahuete, sésamo, almendra, etc.
Y una vez comprobada esta tolerancia se suspenden las intoleradas, nunca todas ellas.
Los frutos secos pueden encontrarse en productos de panadería, pastelería y chocolates. Tener cuidado con salsas con componentes desconocidos.