
¿Cuáles son las recomendaciones para el destete y la introducción de alimentos sólidos?
Se recomienda comenzar poco a poco el retiro de la lactancia materna o destete.
Dependiendo de los controles de crecimiento físico y desarrollo, se pueden ir realizando variaciones a la dieta.
El destete del niño alimentado al pecho debe depender de las necesidades de la madre y del hijo. Se considera que la lactancia materna exclusiva, prolongada durante al menos 6 meses, es la alimentación ideal del lactante.
El momento de introducir los alimentos sólidos depende de las necesidades y de la buena disposición del niño, pero los lactantes no necesitan estos alimentos antes de los 6 meses de edad.
Los pediatras realizan las siguientes recomendaciones para que el destete se haga de manera adecuada:
- Comenzar a disminuir las tomas de leche materna a partir de los seis meses.
- Estimular el uso de la taza en lugar del biberón desde edades tempranas.
- Los alimentos sólidos deben ofrecerse con cuchara y hay que introducirlos de uno en uno, para establecer si son tolerados.
- Consumir alimentos ricos en calorías, pero nutritivos evitando exceso de azúcares, snacks como patatas fritas, bebidas comerciales y otras.
- Asegurar el aporte de hierro con alimentos como la carne y cereales enriquecidos con hierro.
- Asegurar el aporte de zinc con carne, lácteos, trigo y arroz.
- No consumir muchos fitatos, sustancias que están presentes en alimentos como los cereales integrales, frutos secos y las legumbres como la soja. Esto es porque interfieren en la absorción de minerales como el calcio en el intestino del bebé.
- Tratar de mantener la lactancia materna hasta el año de edad y luego continuar con leche de fórmula adecuada para la edad.
- No administrar más de 720 ml de leche de vaca al día.
- No dar más de 180 ml de zumos de frutas.
- Preferir siempre la leche materna, la leche de fórmula o el agua como líquidos.
Cuando el destete se considera deseable, se lleva a cabo poco a poco, a lo largo de semanas o meses, sustituyendo una toma del pecho por un biberón o taza de zumo de fruta o leche artificial, cuando el niño tiene unos 7 meses de edad.
Algunos lactantes siguen mamando una o dos veces al día además de tomar otros alimentos, incluso hasta los 18 o 24 meses.
Algunos padres incitan al niño a tomar grandes cantidades de alimentos sólidos para que duerman durante toda la noche, pero no hay pruebas que respalden esta costumbre.
Muchos alimentos infantiles comercializados son muy ricos en almidón, que carece de vitaminas y minerales, posee un alto contenido calórico y es muy rico en celulosa, mal digerida por los lactantes. Otros tienen también un elevado contenido de sodio (>200 mg/tarro), por lo que no son aconsejables. Los purés caseros son mucho más adecuados.
Para evitar las sensibilizaciones alimenticias, hay que evitar el consumo de huevos, pescados y chocolate en los niños menores de 1 año de edad.



Dr. Ignacio Antépara Ercoreca
Especialista en Alergología por la Universidad de Navarra y licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad del País Vasco.
Autor originalDra. Yolanda Patricia Gómez González
Especialista en Medicina general y licenciada en medicina por la universidad nacional de Colombia.
Revisor clínico