El hiperaldosteronismo, o simplemente aldosteronismo, es una enfermedad de las glándulas suprerrenales que produce una secreción anormalmente elevada de la hormona aldosterona, cuya función principal es regular el equilibrio de agua y sal del organismo influyendo sobre la tensión arterial.
La aldosterona es una hormona producida por las glándulas suprarrenales, que se encarga de retener sodio y agua en el riñón, produciendo así un aumento del volumen intravascular cuando sea necesario.
Esta acción se realiza mediante un complejo mecanismo en el que intervienen también la renina y angiotensina que son las enzimas encargadas de causar la secreción de aldosterona.
Hay dos tipos de aldosteronismo:
Se produce cuando un adenoma (tumor benigno) de la corteza de las glándulas suprarrenales o más raramente un carcinoma, producen una hipersecreción de aldosterona que produce aumento de sodio, cloro y volumen vascular, produciendo hipertensión, así como nefropatía y alteración analítica.
La secreción aumentada de aldosterona está producida en respuesta a estímulos que nacen fuera de las glándulas suprarrenales
El síntoma más evidente suele ser la hipertensión (elevación de la tensión arterial).
Otros síntomas que pueden aparecer son:
El diagnóstico del aldosteronismo primario pasa por demostrar una secreción aumentada de aldosterona y buscar su causa (adenomas o carcinomas).
El aldosteronismo secundario suele estar producida como efecto secundario de la insuficiencia cardiaca congestiva, la ascitis de la cirrosis hepática y el síndrome nefrótico
El tratamiento del aldosteronismo primario dependerá de la causa, siendo el tratamiento