¿Cuál es el efecto del calcio y del potasio en el corazón?

El potasio es el catión intracelular más abundante. La proporción entre el potasio intracelular y extracelular es uno de los factores que más influye sobre la conducción de los impulsos nerviosos y la contracción de la célula muscular, entre ellas las miocárdicas. Por ello alteraciones pequeñas en sus concentraciones, pueden dar clínica severa a nivel cardíaco.

Los efectos de la hipopotasemia a nivel cardíaco suelen mínimos si este no es menor de 3 mEq/l. Si disminuye más, puede producir diferentes arritmias como estrasístoles ventriculares, arritmias supraventriculares, bloqueo auriculoventricular de diferentes grados y finalmente taquicardias ventriculares que pueden acabar en fibrilación ventricular y paro cardiaco. En el ECG hay una serie de cambios característicos y consecutivos: depresión del ST, aumento de la amplitud en la onda U y desaparición de la onda T. La hiperpotasemia produce cambios en el ECG a partir de 5,5 mEq/l y se produce un acortamiento del QT, ondas T altas y picudas. Si supera los 6 mEq/l el QRS se va ensanchando, desaparece la onda P y progresivamente aparece la asistolia.

El calcio está implicado en los sistemas de conducción nerviosa y la contracción muscular, entre otras. El acoplamiento excitación-contracción en el músculo cardíaco es calcio dependiente. En la hipocalcemia se produce una alteración del potencial de la membrana celular. Si es intensa se puede producir un bloqueo cardíaco, con aparición característica de alargamiento del QT y ST. En la hipercalcemia grave produce un acortamiento del QT y pueden presentarse arritmias, sobre todo si el paciente está tomando digital. Una hipercalcemia superior a 18 mgr/dl condice a shock por alteración de la contractilidad miocárdica.