
¿Cómo debe configurarse la dieta del anciano?
La alimentación en el anciano debe ser equilibrada en cantidad y calidad.
- Cantidad: debe haber un contenido calórico suficiente entre 1750 y 2100 calorías al día.
- Calidad: Debe haber un equilibrio entre proteínas, grasas e hidratos de carbono habituales en la alimentación. Además, debe contener suficiente aporte de fibra, vitaminas, minerales como el calcio y líquidos (preferiblemente agua).
Como apoyo, es necesaria la exposición solar que produce la formación de vitamina D necesaria para la utilización del calcio de la dieta.
Características generales de la dieta del anciano
Las características generales de la dieta del anciano son:
- Se debe ofrecer una dieta variada y bien presentada, respetando los gustos, costumbres y creencias personales del anciano.
- Se debe aprovechar para realizar contacto con otras personas, en especial con la familia, a las horas de la comida.
- Los alimentos deben de ser de fácil masticación y deglución.
- Las comidas no deben de ser copiosas, es mejor aumentar la frecuencia horaria, por ejemplo, realizar cuatro o cinco comidas pequeñas al día.
- Dar mucha importancia a los derivados lácteos (leche, quesos, yogures, etc.).
- Bajar la administración de azúcar, aunque no es recomendable suspenderla del todo.
- Cuidar la ingesta de sal a menos de 2 gramos al día.
- Mantener los alimentos de origen animal (carnes) para consumir proteínas de origen animal, pero evitando el exceso de grasas.
- Priorizar los alimentos con grasas poliinsaturadas como los aceites vegetales (oliva) y los pescados.
- Dar gran importancia a la ingesta de fibra en forma de cereales integrales, frutas, verduras y legumbres.
- Controlar una ingesta mínima diaria de agua y zumos de un litro. Animar a la persona a beber, ya que por lo general se disminuye la percepción de sed con la edad.
- Se debe animar a la persona a realizar ejercicio físico así sea muy poco, lo cual mejora el apetito y ayuda al equilibrio nutricional.
- Si la persona presenta signos de desnutrición u obesidad, debe ajustarse la dieta por parte de un profesional de la nutrición.
- Si hay gran disminución de la ingesta de alimentos con riesgo de malnutrición se debe requerir una valoración médica.



Dr. Ignacio Antépara Ercoreca
Especialista en Alergología por la Universidad de Navarra y licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad del País Vasco.
Autor originalDra. Yolanda Patricia Gómez González
Especialista en Medicina general y licenciada en medicina por la universidad nacional de Colombia.
Revisor clínico