
Introducción
La tercera consulta de revisión en el embarazo suele realizarse entre la 18 y 20 semana de gestación.
Si estás de más de veinte semanas en esta visita se auscultará el latido fetal para que puedas oír el latido del corazón de tu bebé, lo cual suele ser una experiencia muy emocionante. El latido fetal tiene una velocidad superior a la nuestra. Antes de las veinte semanas no se escucha.
Es posible que ya percibas los movimientos del feto dentro de ti. De nuevo, el médico comprobará si tienes edemas o varices, te pesará y te tomará la tensión para ver que todo continúa dentro de la normalidad.
¿Qué hace el médico durante la tercera consulta de control del embarazo?
El médico analizará contigo los resultados de las pruebas anteriores y te comunicará, si hay un riesgo mayor de 1/270 de síndrome de Down, que conviene que te practiquen una amniocentesis. Es una prueba algo invasiva con un pequeño riesgo de aborto ya que consiste en introducir una aguja en la bolsa de líquido amniótico para analizarlo. Por ello no se recomienda en embarazos normales.
¿Qué pruebas se solicitan en la tercera consulta de control del embarazo?
Las pruebas en esta ocasión consistirán en:
Análisis de orina y sangre: Usualmente dependerán de si hubo algún hallazgo anormal en los primeros laboratorios y es necesario un control de seguimiento.
Ecografía de las 20 semanas: Para verificar que el feto y su pequeño ecosistema están normales. En esta ecografía el ginecólogo medirá el pliegue de la nuca fetal a través del cual se puede descartar, junto con los análisis, el riesgo de síndrome de Down.
Es en este momento cuando se ha demostrado que pueden descubrirse la mayor parte de las anomalías fetales incompatibles con la vida. Antes de la semana 18 el reducido tamaño del feto impide una adecuada visualización de sus órganos por lo que es posible que descubras, si así lo deseas, el sexo de tu bebé.
Por otra parte, En España la legislación vigente permite la interrupción voluntaria del embarazo por malformaciones del feto hasta la semana 22 de gestación, por lo que si se detecta alguna alteración importante se puede plantear dicha interrupción dentro de los plazos establecidos por la ley.
Es probable que el ginecólogo te hable de los cursos de preparación al parto: incluye cursos psicoprofilácticos y en algunos casos programas de fisioterapia para fortalecimiento del piso pélvico (zona alrededor de la vulva y vagina).
Los cursos psicoprofilácticos o de parto natural son un tema controvertido con el cual el ginecólogo podría no estar de acuerdo.
En general es muy aconsejable sobre todo para partos sin anestesia epidural, sin embargo, existen casos en que aumenta el nivel de estrés en la embarazada con respecto al momento del parto porque puede crear miedos innecesarios acerca de los medicamentos y procedimientos normales del parto, lo cual no es bueno para la madre ni para el feto.
Hay que sopesarlo con el especialista, y tener en cuenta la propia personalidad y el tipo de parto deseado.
Si todo es normal, te citará para dentro de cuatro semanas.



Dr. Ignacio Antépara Ercoreca
Especialista en Alergología por la Universidad de Navarra y licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad del País Vasco.
Autor originalDra. Yolanda Patricia Gómez González
Especialista en Medicina general y licenciada en medicina por la universidad nacional de Colombia.
Revisor clínico