La mastopatía fibroquística es la enfermedad más frecuente de la glándula mamaria, propia de la tercera y cuarta décadas de la vida.
La Organización Mundial de la Salud decidió denominarla displasia mamaria, con un significado más amplio, que incluye lesiones benignas y algunas potencialmente malignas.
La frecuencia más alta está entre 35 y 49 años. Se calcula que 50% de mujeres en edad reproductiva tiene mastopatía fibroquística en forma clínica, y hasta en el 90% hay cambios fibroquísticos en el tejido mamario.
Se sugiere que un exceso o "disbalance" (desequilibrio) de estrogénos (hormonas sexuales femeninas) puede ser responsable de la enfermedad.
El diagnóstico es fundamentalmente clínico.
Pueden ser necesarios métodos auxiliares de diagnóstico como mamografía, ecografía mamaria (exploración con ultrasonidos), aspiración de los quistes, etc.
El tratamiento se individualiza de acuerdo a la respuesta en cada paciente.
Medicamentos: Antiinflamatorios no esteroideos, agonistas dopaminérgicos, progestágenos, antiestrógenos, anticonceptivos orales, antagonistas de hormonas liberadoras hipotalámicas, …