
El niño de tres meses. Desarrollo
¿Qué se espera a esta edad?
- Sostiene la cabeza y empuja como para sentarse.
- Mira a los ojos.
- El niño empieza a tener más lágrimas y saliva, babea mucho y esto no quiere decir que ya le vayan a salir los dientes.
- Junta las manos a nivel de la mitad del cuerpo.
- Agarra los objetos que se ponen en su mano.
- Se mira su propia mano.
¿Qué le gusta?
- Alcanzar objetos y tomarlos con la mano abierta.
- Verse y mover la mano empuñada.
- Colocar juguetes en la boca o su misma mano, succionarlos, o morderlos.
- Reír y gritar.
- Bailar con usted mientras lo sujeta firmemente.
¿Cómo estimularlo?
- Masaje.
- Vista desde su cuna.
- Campanas y cascabeles, sonajeros más ruidosos, etc.
- Una sábana de colores estampados en su cuna.
- Música.
- Juguetes o estructuras móviles en su cuna.
- Salidas al exterior en cochecito.
- Cambio de posiciones en la cuna apoyando diferentes partes de la cabeza y volteando a diferentes partes.
- Si no hay antecedentes alérgicos, y si su pediatra está de acuerdo, al final del tercer mes se puede empezar a dar leche combinada con cereal de arroz o de maíz (sin gluten).
Indicadores de problemas en el desarrollo
- No fija su mirada.
- Es muy apático o se enfada con frecuencia.
- Permanece sin moverse la mayor parte del tiempo.
- Mantiene sus manos cerradas.
- No sostiene la cabeza.
- NO SE RIE.
Vacunas
Se pueden aplicar las vacunas de Haemophilus influenzae tipo B y meningococo (meningitis), si no se las puso el mes pasado.
Guía práctica para la edad de tres meses
- Si no hay antecedentes alérgicos, y si su pediatra está de acuerdo, al final del tercer mes se puede empezar a dar leche combinada con cereal de arroz o de maíz (sin gluten).
- Siempre que saque al bebé en coche, asegúrelo en el asiento de seguridad.
- No cargar al bebé mientras se esté tomando un líquido caliente o, mucho menos, fumando.
- Seleccionar juguetes que sean irrompibles, que no tengan partes pequeñas, desprendibles ni bordes puntiagudos y que sean un poco grandes para que no se puedan tragar.
- Es normal que ya empiece a babear mucho, y ello no quiere decir que le vayan a salir los dientes.
- Es importante irle dando a conocer quién es quién en casa.
- Debe poco a poco aprender a estar solito a ratos.
- Tiene que ir conociendo y respetando la rutina de la casa, y tener claro quién manda. Pero SIEMPRE habrá que ser muy paciente.
Hay que tener en cuenta siempre que no existen reglas rígidas para alcanzar las diferentes etapas, un plazo de uno o dos meses no es patológico en absoluto, con tal de que el niño responda con expresividad a los estímulos que se le dan.



Dr. Ignacio Antépara Ercoreca
Especialista en Alergología por la Universidad de Navarra y licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad del País Vasco.
Autor originalDra. Yolanda Patricia Gómez González
Especialista en Medicina general y licenciada en medicina por la universidad nacional de Colombia.
Revisor clínico