
¿Qué es una dieta sin gluten?
Una dieta sin gluten consiste en eliminar completamente el gluten de la alimentación.
El gluten es una proteína presente en algunos cereales como el trigo, la cebada, el centeno. La avena, aunque naturalmente no contiene gluten, casi siempre sufre contaminación cruzada con estos cereales, por lo que también debe evitarse a menos que esté específicamente certificada como 'sin gluten'.
Esta pauta es el tratamiento fundamental para personas con enfermedad celíaca, sensibilidad al gluten no celíaca o alergia al trigo.
Su objetivo es evitar la respuesta inmunitaria o inflamatoria desencadenada por el gluten y favorecer la recuperación del intestino delgado y el bienestar general.
No debe confundirse con una dieta para perder peso: seguirla sin indicación médica puede provocar carencias nutricionales.
¿Para quién está recomendada una dieta sin gluten?
Está recomendada para:
- Personas con diagnóstico confirmado de enfermedad celíaca mediante análisis serológicos y biopsia intestinal.
- Individuos con sensibilidad al gluten no celíaca, tras descartar enfermedad celíaca y alergia al trigo.
- Personas con alergia al trigo, donde el gluten y otras proteínas del trigo actúan como alérgenos.
- En casos puntuales, puede emplearse temporalmente bajo control médico en enfermedades intestinales con malabsorción o irritación mucosa.
En personas sin patologías relacionadas, no se recomienda eliminar el gluten, ya que puede limitar innecesariamente la variedad alimentaria y el aporte de nutrientes.
¿Qué alimentos se pueden comer en una dieta sin gluten?
Los siguientes alimentos son naturalmente libres de gluten:
- Cereales y harinas sin gluten: Arroz, maíz, mijo, quinoa, amaranto, trigo sarraceno (alforfón), teff, sorgo y sus derivados (pan, pasta, galletas o repostería certificados “sin gluten”). Harinas de castaña, harina de tapioca, harina de guisante o harina de camote.
- Legumbres: Lentejas, garbanzos, alubias, guisantes.
- Frutas y verduras: Todas, frescas y sin salsas o rebozados.
- Carnes, pescados y huevos: Siempre que no estén empanados ni elaborados con harinas que contengan gluten.
- Lácteos naturales: Leche, yogur, quesos y derivados sin espesantes o aditivos con gluten (evitando los quesos azules que no estén certificados, ya que algunos se elaboran con pan de centeno).
- Grasas y aceites: Aceite de oliva, mantequilla, aguacate, frutos secos naturales.
- Bebidas: Agua, infusiones, zumos naturales y bebidas vegetales certificadas sin gluten.
¿Qué alimentos deben evitarse en una dieta sin gluten?
Los siguientes alimentos deben evitarse por contener gluten:
- Cereales con gluten: Trigo, cebada, centeno y sus derivados (espelta, kamut, triticale).
- Productos elaborados con estos cereales: Pan, galletas, pastas, bollería, cuscús, rebozados, cerveza y salsa de soja convencional.
- Sémolas de trigo empleadas en pastas alimenticias (macarrones, sopas, etc.).
- Productos procesados sin etiquetado claro: Embutidos, salsas, sopas o precocinados, ya que pueden contener gluten oculto.
- Avena no certificada "sin gluten": Suele estar contaminada por contacto con otros cereales.
- Algunas golosinas y dulces pueden contener harina espolvoreada.
¿Cómo organizar una dieta sin gluten?
En caso de seguir una dieta sin gluten se deben tener en cuenta las siguientes recomendaciones:
- Lee siempre las etiquetas: revisa la lista de alérgenos y busca el símbolo internacional “sin gluten” o menciones como ”gluten-free”. No confíes en productos a granel o sin etiquetar.
- Cocina en casa cuando sea posible, para evitar contaminación cruzada.
- Separa los utensilios, aceites, tostadores y tablas para preparar alimentos sin gluten.
- Si comes fuera de casa, informa al personal del restaurante y pregunta por los ingredientes.
- Mantén una dieta equilibrada: Combina alimentos naturales sin gluten (cereales integrales alternativos, legumbres, frutas y verduras).
- Evita abusar de productos industriales “sin gluten”, ya que pueden tener más grasas o azúcares.
¿Qué precauciones se deben tener?
Antes y durante el seguimiento de una dieta sin gluten se deben tener en cuenta las siguientes precauciones:
- No iniciar una dieta sin gluten sin diagnóstico médico previo: puede dificultar posteriores pruebas diagnósticas.
- Revisar posibles déficits nutricionales (hierro, ácido fólico, vitamina D, calcio, fibra) al retirar cereales tradicionales.
- Consultar con un dietista-nutricionista especializado para planificar una alimentación completa y segura.
- En niños y adolescentes, seguir controles periódicos para asegurar un crecimiento y desarrollo normales.
¿Qué beneficios tiene seguir una dieta sin gluten en los casos recomendados?
Las personas que requieren una dieta sin gluten pueden observar los siguientes beneficios al seguirla en su calidad de vida:
- Mejora de síntomas digestivos (dolor abdominal, diarrea, distensión).
- Recuperación de la mucosa intestinal en celíacos y prevención de complicaciones a largo plazo.
- Aumento de energía, absorción adecuada de nutrientes y mejor estado general.
- Prevención de reacciones alérgicas o inflamatorias en personas sensibles o alérgicas.



Dr. Ignacio Antépara Ercoreca
Especialista en Alergología por la Universidad de Navarra y licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad del País Vasco.
Autor originalDr. José Antonio Zumalacárregui
Especialista en Medicina Familiar y Comunitaria y licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad del País Vasco.
Revisor clínico