¿Qué es la vasectomía?
La vasectomía es una técnica de cirugía para ligar los conductos deferentes, que comunican los testículos con la vesícula seminal, donde los espermatozoides se acumulan para salir en la eyaculación.
Mediante esta técnica, se cierra el paso de los espermatozoides del testículo lo que produce una esterilidad permanente del varón.
Está pensado para ser un método permanente en hombres que no desean tener hijos. No es necesario haber tenido hijos antes para realizarla.
La efectividad del método es muy alta. En general, es de menos de un embarazo por 100 mujeres al año (menos de 2 por cada 1.000 mujeres).
Es importante entender que, durante los tres meses siguientes a la cirugía, todavía hay espermatozoides en el semen, así que hay que utilizar un método de contracepción adicional durante ese tiempo.
¿En qué consiste la técnica de la cirugía?
La técnica quirúrgica consiste en una incisión en la línea media de la piel de los testículos llamada escroto, a través de la cual se extraen los dos conductos deferentes, los cuales se cortan y cauterizan.
Se utiliza anestesia local para insensibilizar la piel. La inyección no produce dolor, más bien un ligero pellizco. Todo esto se realiza en menos de diez minutos.
No hay contraindicaciones específicas para realizar la vasectomía.
En general, se espera un poco para realizarla en caso de que haya alguna infección en el sitio de la cirugía, infecciones activas o enfermedades graves, diabetes u otra enfermedad crónica no compensadas o el paciente presente signos de depresión o sea muy joven.
¿Cuál es la recuperación tras la cirugía?
No se siente dolor después de la operación; en la mayoría de los hombres únicamente acontecen unas ligeras molestias que desaparecen en unos pocos días. Es posible la aparición de un pequeño hematoma alrededor de los testículos que desaparece en unos días.
Se recomienda descanso de un día o dos después de la operación, por lo que lo más adecuado es intervenir en viernes para volver así al trabajo el lunes. No son aconsejables los esfuerzos intensos al menos durante una semana.
En una semana pueden reanudarse las relaciones sexuales. Sin embargo, aún quedan espermatozoides que deben eliminarse. Esto se consigue definitivamente tras 15 eyaculaciones, por lo que será necesaria la utilización de anticonceptivos durante este tiempo.
En la mayoría de los centros se comprobará entonces a microscopio (espermograma) la ausencia de espermatozoides en una muestra de semen. Si los resultados son negativos dejarán de ser necesarias las medidas anticonceptivas.
¿Cuál es el pronóstico de la cirugía?
Se han descrito recanalizaciones espontáneas del conducto deferente años después de la vasectomía, pero es tan improbable que resulta más bien excepcional.
La operación no produce alteración alguna en cuanto a la frecuencia, potencia o intensidad del sexo, el orgasmo o la eyaculación.
La única diferencia es que el semen no contiene espermatozoides, lo cual no cambia su aspecto. Estos mueren "de viejos" en el lugar donde se realizó la incisión donde son reabsorbidos por el organismo.
Es cierto que si la vida sexual se veía de alguna forma afectada por miedo a un embarazo, es posible que esta mejore tras la intervención.
¿Es reversible la operación?
Dos de cada tres varones que, habiendo sido operados de vasectomía, deciden volver a ser fértiles, lo consiguen. Las posibilidades de éxito dependen del tipo de vasectomía previa y del tiempo trascurrido. Por encima de los diez años comienza a ser más difícil.
Dr. Ignacio Antépara Ercoreca
Especialista en Alergología por la Universidad de Navarra y licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad del País Vasco.
Autor originalDra. Yolanda Patricia Gómez González
Especialista en Medicina general y licenciada en medicina por la universidad nacional de Colombia.
Revisor clínico