La blefaritis es la inflamación del tejido que forma el párpado. Se suele presentar más en los bordes del mismo en forma de irritación del borde, con un color rojo y formación de escamas en la zona. En otras ocasiones, es una lesión más difusa por todo el párpado con lesiones de tipo eccema con picor y descamación.
Da una impresión de párpados escamosos debido a su apariencia. Se caracteriza por la formación de escamas entre las pestañas que muchas veces caen dentro de los ojos, produciendo una sensación de que hay algo dentro de ellos. También los ojos se ven rojos. Los bordes de sus párpados están enrojecidos la mayor parte del tiempo, dando la impresión de que ha estado llorando, y puede producir picor local.
La blefaritis escamosa está causada por la infección local de bacterias y hongos en una piel seborreica.
Es una forma de expresión de una alergia de contacto a productos de cosmética en su mayor parte.
Los alérgenos que habitualmente resultan más sospechosos para todo médico suelen ser los cosméticos que se aplican directamente en los párpados: sombreadores, lápices y coloretes, así como los disolventes cosméticos para eliminarlos. Pero en realidad no son los cosméticos para los ojos los responsables del mayor número de dermatitis de contacto sino cualquier sustancia que contamine los dedos y que por medio de la manos sea llevada a los ojos la que puede provocar dermatitis agudas o crónicas de los párpados:
No se debe olvidar nunca que los propios medicamentos utilizados para los ojos, colirios y pomadas pueden ser los causantes de una blefaritis alérgica de contacto.
Los alérgenos de los medicamentos oftalmológicos pueden ser las sustancias activas: neomicina, bacitracina, sulfamidas, anticolinérgicos, antihistamínicos, anestésicos locales, óxido amarillo de mercurio, o los conservadores de los mismos (parabenos, mercuriales, etilenodiamina, etc.)
La blefaritis escamosa se suele tratar con colirios o pomadas oftálmicas con antibióticos y corticoides asociados. Para aplicar el tratamiento debe de lavarse bien las manos previamente. Mirándose en un espejo, humedezca un bastoncillo de algodón en el colirio o pomada indicadas por su médico y suavemente "cepille" y limpie todas las áreas escamosas de los párpados y las pestañas. No limpie las escamas con sus dedos, pues aumenta el riesgo de infección. Sea cuidadoso de no rasparse el ojo accidentalmente con el aplicador. Normalmente su médico le indicará que repita el procedimiento 2 o 3 veces al día durante 7 o 10 días.
Posteriormente suele indicarse la utilización de un champú anti-seborréico, úselo en su cuero cabelludo el día que comience su tratamiento para los párpados y luego una semana más tarde. Siempre debe de tener cuidado de que el champú no entre en sus ojos, manténgalos cerrados. Cuando ya no tenga más escamas, usted puede evitar la recurrencia futura continuando con el uso del champú por lo menos una vez al mes.
La blefaritis alérgica se trata con esteroides tópicos y evitando las causas que la han producido, por ello el diagnóstico mediante unas pruebas de contacto por un alergólogo es el paso previo al tratamiento.
Ver más