
¿Qué es una radiografía de abdomen?
La radiografía del abdomen es la utilización de los rayos X para formar una imagen bidimensional del abdomen con sus estructuras anatómicas (estómago, intestinos, hígado, páncreas, riñones, etc.).
Los rayos X son muy energéticos. Gracias a esta característica, son capaces de atravesar el cuerpo humano y generar una imagen en una placa fotográfica o una imagen digital.
Los rayos X de abdomen son utilizados principalmente en los servicios de urgencia, ya que proporcionan una imagen rápida y de relativamente fácil interpretación que permite descartar rápidamente problemas serios de salud como, por ejemplo, una obstrucción o una perforación intestinal.
En la consulta ambulatoria han ido siendo reemplazados por exámenes como la ecografía y la tomografía.
¿Qué utilidad tiene y cómo se interpreta una radiografía de abdomen?
Los rayos X, al atravesar estructuras densas como el hueso, reflejan un tono blanco en la placa. Por otro lado, cuando atraviesan estructuras con aire, se visualiza un tono negro.
Entre estas dos densidades, pueden manifestarse diversos tonos de grises, los cuales varían según la densidad de la estructura atravesada por los rayos X.
Así, se generará una representación en dos dimensiones de la anatomía abdominal, en la que distintos matices desde el negro hasta el blanco delinean y demarcan diversas estructuras y tejidos.
Al contar con un estándar de referencia, es posible contrastar las variaciones que surjan, obteniendo así información relevante para el diagnóstico de diversas afecciones médicas.
Se pide una radiografía de abdomen en caso de:
- Síntomas urinarios con sospecha de cálculos renales
- Dolor de espalda
- Dolor abdominal
- Estreñimiento
- Sospecha de obstrucción intestinal
- Sospecha de que se haya ingerido un cuerpo extraño
¿Cómo se realiza la radiografía abdominal?
La toma de radiografías abdominales se llevará a cabo en un entorno especialmente preparado, que cuente con un equipo generador de rayos X.
Este espacio debe estar cuidadosamente acondicionado y fortificado para garantizar que los rayos X se mantengan confinados, evitando su escape hacia el exterior. Para lograr esto, se emplean barreras protectoras robustas, como paredes de hormigón de considerable espesor reforzadas con plomo.
Hay dos proyecciones tipo de una radiografía simple de abdomen:
- Rayos X abdominal en decúbito supino. El paciente estará tumbado boca arriba en una camilla y el aparato de Rayos X se colocará sobre el mismo, la placa de fotografía para obtener la imagen se colocará en la parte inferior del paciente.
- Rayos X abdominal en bipedestación. Con el paciente de pie, el aparato de Rayos X se colocará detrás del paciente y la placa de fotografía para obtener la imagen se colocará delante del paciente. Sirve para poder evaluar niveles de líquido en el intestino en caso de una obstrucción intestinal y niveles de aire en caso de perforación de una víscera hueca.
La exploración será llevada a cabo por un técnico en radiología, quien se encargará de adaptar el proceso a consideraciones como, la anatomía, el peso del paciente y otras variables para ajustar el tiempo de exposición y la potencia de los rayos X.
Para salvaguardar su propia seguridad, el técnico empleará las medidas de protección adecuadas.
Durante la realización de una radiografía, es importante mantenerse inmóvil durante unos segundos con el fin de evitar el riesgo de desenfoque y la pérdida de definición en la imagen radiográfica.
En ciertos casos, su médico podría requerir la obtención de múltiples radiografías o imágenes tomadas desde distintas posiciones.
¿Cómo preparar al paciente para el estudio?
Las indicaciones para realizar una radiografía de abdomen son:
- En el caso de las radiografías simples, generalmente no se requiere estar en ayunas. Sin embargo, en otros tipos de exploraciones que involucran radiación X, podría ser necesario ayunar, junto con otras instrucciones específicas.
- Es esencial desvestirse en la región a examinar y remover cualquier accesorio metálico, como collares, pulseras, relojes, pendientes y cinturones.
- Las pacientes deben notificar al médico o al técnico de radiología si están embarazadas o podrían estarlo, así como si están utilizando un dispositivo intrauterino (DIU).
¿Qué problemas y riesgos podría tener?
La realización de una radiografía simple de abdomen es completamente indolora.
Es importante destacar que la exposición a los rayos X es mínima en la actualidad, gracias a la tecnología de los equipos modernos que emplean niveles muy bajos de radiación para obtener imágenes precisas.
Aunque la exposición es baja, las mujeres embarazadas y los niños son especialmente sensibles a esta radiación, por lo cual se debe ejercer mayor precaución y evitar someterlos a exploraciones innecesarias.
En mujeres embarazadas se prefiere realizar ecografías en lugar de radiografías en la mayoría de casos.
¿Qué indican los resultados fuera de lo normal?
Un resultado anormal en una radiografía simple de abdomen puede indicar:
- Absceso abdominal
- Aneurisma de aorta
- Ascitis (líquido en el peritoneo)
- Calcificación de aorta
- Litiasis renal
- Malformaciones renales
- Obstrucción intestinal
- Perforación intestinal
- Retención de orina
- Tumores abdominales
- Cuerpos extraños
Por lo general, cuando se encuentra una anormalidad en la radiografía de abdomen es necesario complementar el diagnóstico con otras imágenes más complejas como la ecografía, la tomografía o la resonancia nuclear magnética.



Dr. Ignacio Antépara Ercoreca
Especialista en Alergología por la Universidad de Navarra y licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad del País Vasco.
Autor originalDra. Yolanda Patricia Gómez González
Especialista en Medicina general y licenciada en medicina por la universidad nacional de Colombia.
Revisor clínico