La enfermedad por el virus de Marburgo es una fiebre hemorrágica viral grave y potencialmente mortal causada por el virus de Marburgo (MARV).
El virus pertenece a la familia de los filovirus (Filoviridae) al que también pertenece el Ébola. Los dos virus están relacionados y causan síntomas similares.
Los filovirus se dividen en tres géneros:
Esta enfermedad debe su nombre al registrarse el primer brote en la ciudad de Marburgo (Alemania) en el año 1967.
Después se han notificado brotes y casos esporádicos en Angola, Kenia, la República Democrática del Congo, Sudáfrica, Uganda y recientemente en Guinea Ecuatorial.
Se considera que el murciélago de la fruta es el huésped natural del virus de Marburgo.
Sin embargo, los brotes de epidemias del virus de Marburgo suelen comenzar con la transmisión directa del virus de monos infectados a personas que han estado en contacto con tejidos de los monos. Posteriormente, los brotes pueden propagarse de persona a persona en entornos hospitalarios, lo que amplifica la transmisión del virus.
El periodo de incubación del virus oscila de 3 a 9 días.
Se presenta como una enfermedad febril aguda que puede progresar al de 6 u 8 días a manifestaciones hemorrágicas severas.
El virus al entrar en el torrente sanguíneo conduce a una extensa fragilidad capilar y la alteración de la coagulación. Los pacientes sangran por la nariz, las encías o la vagina y experimentan hemorragias internas y externas masivas.
Muy a menudo, los pacientes manifiestan una erupción cutánea en su tronco en las primeras etapas de la enfermedad.
Las manifestaciones clínicas del virus incluyen:
Los signos y síntomas pueden volverse cada vez más más severos.
Los médicos deben considerar el diagnóstico de enfermedad por el virus de Marburgo para pacientes febriles que, dentro de los 10 días antes del inicio de fiebre, han viajado a zonas de donde existe un brote activo, han tenido contacto directo con sangre u otros fluidos corporales de una persona sospechosa de tener fiebre hemorrágica, o han trabajado en un laboratorio que maneja virus de la fiebre hemorrágica.
Actualmente no existe un tratamiento ni vacuna efectivo para la enfermedad por el virus de Marburgo.
Únicamente se puede administrar terapia de apoyo mediante rehidratación oral o intravenosa y el tratamiento de los síntomas asociados.
El pronóstico de la enfermedad es malo ya que tiene una tasa de mortalidad del 50%. En los últimos brotes las tasas de mortalidad han oscilado del 24 al 88%.
Ver más