
¿Qué es la uretritis?
La uretritis es la inflamación de la uretra que se manifiesta con irritación e hinchazón de la misma.
La uretra es el conducto por el que discurre la orina desde la vejiga hacia el exterior.
La uretritis puede aparecer tanto en mujeres u hombres y durar semanas o meses.

¿Cuál es la causa de la uretritis?
La uretritis se puede clasificar según sus causas en:
- Uretritis gonocócica: Causada por la bacteria responsable de la gonorrea (neisseria gonorrheae).
- Uretritis no gonocócica: No relacionada con la gonorrea.
- Por infección de otras bacterias o virus (Chlamydia trachomatis, mycoplasma genitalium, virus del herpes, Epstein Barr, adenovirus etc.).
- Por un problema estructural (el estrechamiento de la uretra).
Casi todos los organismos que ocasionan las enfermedades de transmisión sexual (ETS) pueden causar uretritis (como la gonorrea, la clamidiasis, etc.).
Se denomina síndrome uretral cuando no existen evidencias de que la uretritis esté causada por una infección de bacterias o virus.
¿Cuáles son los síntomas de la uretritis?
Los principales síntomas de la uretritis son:
- Aumento en la urgencia y la frecuencia urinaria.
- Micción dolorosa: Sensación de malestar al orinar, con quemazón o picor en la uretra y parte baja del abdomen.
- Descarga uretral, que puede ser sanguinolenta (con sangre) o purulenta (con pus).
¿Cómo se puede diagnosticar la uretritis?
Para el diagnóstico de la enfermedad, sería recomendable realizar las siguientes pruebas diagnósticas:
- Análisis de orina, que puede revelar la posible existencia de una infección.
- Extendido de la secreción uretral que se colorea con la tinción de Gram para tener un presunto diagnóstico mientras se obtienen los resultados de los otros exámenes.
- Exámenes específicos para Neisseria gonorrhoeae y Chlamydia trachomatis llamados pruebas de amplificación de ácido nucleico (NAAT) que se pueden practicar en la secreción de la uretra o en la orina.
- Cultivo de orina con antibiograma para confirmar la infección, el agente causante y el antibiótico más adecuado.
- Cultivo de exudado uretral o cultivo vaginal para descartar cualquier ETS (Enfermedad de Transmisión Sexual).
- Cistoscopia, para examinar la uretra directamente. Esto no siempre es necesario, aunque si la uretritis no se consigue curar, o no se llega a determinar su causa, puede llegar a tener que realizarse.
- Si se confirma la infección de transmisión sexual, se recomienda realizar exámenes adicionales para verificar que la persona no padezca de infección por VIH y sífilis entre otros.
¿Cuál es el tratamiento recomendado en la uretritis?
Si hay evidencia de infección, se prescriben antibióticos (ceftriaxona, doxiciclina, azitromicina) y, después de haber tomado la pauta completa de la medicación, se hacen unos cultivos seriados para confirmar su eficacia.
Cuando la uretritis, tras el tratamiento con antibióticos, no remite al cabo de 6 semanas se denomina uretritis crónica.
A las mujeres que han presentado episodios repetidos de uretritis o cistitis puede prescribírseles una dosis de antiséptico postcoital (tomada poco tiempo antes o después de la relación sexual).
A las personas con síndrome uretral (síntomas sin la evidencia de infección) se les puede prescribir fenazopiridina para disminuir el malestar al orinar.
En caso de infecciones de transmisión sexual se deben evaluar y tratar las parejas sexuales.
¿Cuál es el pronóstico de la uretritis?
En la mayoría de casos, es posible identificar el agente causante, e iniciar el tratamiento apropiado con un buen pronóstico.
¿Cómo puedo prevenir la uretritis?
Es de gran ayuda beber mucha agua.
Las mujeres con infecciones del tracto urinario asociadas a la relación sexual (los síntomas aparecen dentro de las 24 horas posteriores a la relación) deberían orinar justo después de ésta.
También es importante mantener una buena higiene, tanto por parte de la persona afectada como por la de su pareja. La buena higiene es aquélla adecuada, ni excesiva ni deficiente, y se debe llevar a cabo con jabones adecuados para la zona genital, no excesivamente agresivos.
Las prácticas de sexo seguro pueden disminuir el riesgo de adquirir enfermedades de transmisión sexual (ETS) relacionadas con la uretritis.
Tan pronto aparecen los síntomas es importante obtener la atención adecuada, con el fin de evitar el daño estructural que puede ocasionar en los tejidos una inflamación persistente o el rascado.
¿Qué complicaciones pueden aparecer?
Una infección prolongada, sin tratamiento puede progresar y derivar en una pielonefritis (infección del riñón) o producir un daño estructural en el tracto urinario haciendo difícil la micción y la eyaculación.



Dr. Ignacio Antépara Ercoreca
Especialista en Alergología por la Universidad de Navarra y licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad del País Vasco.
Autor originalDra. Yolanda Patricia Gómez González
Especialista en Medicina general y licenciada en medicina por la universidad nacional de Colombia.
Revisor clínico